Para la tercera semana de julio esperaba con ansiedad la llegada de las próximas tres semanas, que serían de vacaciones de trabajo y estudios. Voy a dormir todo lo que me dé la gana, pensaba; no voy a parar la pata, planificaba; debo coger sol para matar esta jinchera absurda, declaraba… Eran esos y otros planes más personales… No eran planes complejos sino comunes y sencillos, pero eran mis planes.
¡Sorpresa! Me agarró una mezcla de sinusitis, ataque de asma y catarro que me tumbó por dos semanas. Nada de eso pude hacer. La he pasado muy mal pero aquí sigo al pie del cañón, reintegrándome a la agenda diaria con más ánimo.
Ayer domingo sería mi primera salida… Cine, late lunch y par de copas en Tía. Todo iba bien hasta las copas a eso de las 5 p.m. Una vez comencé a disfrutar del primer trago comencé a sentirme incómodo, la molestia del cuello y hombro se exacerbó, comencé a toser insistentemente. Decidí regresar a casa, a donde llegué con el ánimo minado sin poder adjudicar por qué, además de las molestias físicas, me sentía incómodo.
A eso de las 6: 50 p.m. me llegó la terrible noticia de que Mickey –Mike, Miguel Angel- había fallecido… Carlie me lo confirmó. Fue una llamada telefónica de segundos. No pudimos abundar, no podíamos hablar.
A veces sin querer y sin explicación presentimos…
Lo que sentí fue como una devastación tipo bomba nuclear. Mickey es –uso el verbo en presente- un amigo de esos cuya amistad trasciende la proximidad física, es una amistad que está ahí y que no necesita el contacto día a día porque la llevas como marca indeleble, que nada ni nadie borrará, son quereres imperturbables. Mi mente rebobinó y recordé con claridad tantas vivencias, tantas travesuras, tantas confidencias, tantas pláticas, muchas compartidas con otros amigos, y otras tan nuestras.
Esto no estaba en los planes.
Hablar con Myraida, Eddie Guerrero y Marcos –quien está en Chile abatido- fue providencial. Las cargas compartidas, como las penas, se nos antojan sentirlas más llevaderas. Aprovechamos para recordar y reafirmarnos en nuestra amistad, también a pesar de que cada cual anda en lo suyo.
Hoy sé que nos despertamos y enfrentamos este día adoloridos y machucados, buscando explicaciones y respuestas que no llegarán. Amanecimos con el alma más curtida, algo necesario para poder continuar nuestro paso por este plano; amanecimos más maduros y más sabios, espero, en este proceso inexorable y misterioso que es la vida.
Te fuiste a destiempo, Mickey, muy a destiempo. Te rindo homenaje póstumo con estas sencillas palabras. Es la mejor forma en que puedo hacerlo.
Nos vemos al otro lado del arcoíris.
Solo pido paz a los que lo conocieron y disfrutaron de su presencia…
Wao! Q manera de escribir más q digno más q hermoso!!
Es increíble como es la vida. Gran ser humano y amigo. Mucha fortaleza a sus familiares y amigos.
Mis mas sentido pésame por un gran amigo que se nos fue. Que descanse en paz.